El artículo periodístico de la escritora Rosa Montero es una reflexión sobre la confiabilidad de los test de inteligencia. La autora expresa su opinión en un famoso periódico argentino, el día 20 de enero de 2008. Dice que no suele fiarse de los test y comenta su sorpresa al saber que la heredera de los Hilton, Paris, es una superdotada. El título del texto: La Asombrosa Inteligencia de Paris Hilton es una síntesis objetiva del contenido.
El primer párrafo con gran habilidad explicita su opinión y motiva la continuidad de la lectura mostrando su desconfianza por los test de inteligencia. En el segundo confirma su poca credibilidad tras leer la noticia que la heredera Paris Hilton es una superdotada. Comenta en tono irónico simulando una conversación entre Paris y su padre: “-¿Qué quieres para tu cumpleaños, nena?; -¿Un cociente intelectual de superdotada, porfa?”; con la intención de mostrar que una chica que tiene mucho dinero puede ganar de su padre lo que sea. Y pone en discusión la veracidad del resultado de la prueba bajo las conocidas actitudes de la heredera. El tercer párrafo es un análisis sobre la ventaja de ser o no un superdotado. El cuarto párrafo trae ejemplos de personas que tienen el cociente alto de inteligencia; enjuicia diciendo que la perseverancia puede llevar a una persona al éxito. Contrasta el talento y el éxito y en el último concluye que la inteligencia no está directamente ligada a la madurez.
La estructura externa contiene cinco párrafos. El lenguaje informal es una marca de todo el texto. Rosa Montero demuestra su punto de vista y se dirige a un lector modelo que se siente a gusto con lo que escribe y comparte de su opinión. Se refiere a este en la tercera persona de plural. La autora española utiliza la primera persona y explicita su presencia, algunos ejemplos son “Nunca me he fiado” (l.1); “Siempre sospeché” (l.7), muestran su presencia explícita. Podemos ver el uso de la tercera persona de plural como generalización de las afirmaciones, “Dicen” (l. 20). Hay la construcción con la partícula de impersonalidad (se considera; l.9). La autora usa la primera persona del plural: “Todos conocemos” (l.34); “Somos animales” (l.40), mostrando empatía y proximidad. Las modalizaciones son características de un texto de opinión e indican la subjetividad del autor enriqueciendo el contenido, un ejemplo es como se refiere a la heredera tratándole de inconmensurable petarda (l.8), mentecata (l.16). Algunas expresiones coloquiales como: ¿No medirán en realidad estos test otra cosa, como el narcisismo, la superficialidad o el delirio egocéntrico? (l. 18-19), dan la fluidez de discurso oral. La intención de la escritora es hablar en derecho con sus lectores, proporcionando un acercamiento con el receptor.
Para terminar, es bueno comentar que los test psicológicos son de gran valor en la labor de un psicólogo. Pero con la difusión y el mal uso de este instrumento percibimos la pérdida de fiabilidad.
El primer párrafo con gran habilidad explicita su opinión y motiva la continuidad de la lectura mostrando su desconfianza por los test de inteligencia. En el segundo confirma su poca credibilidad tras leer la noticia que la heredera Paris Hilton es una superdotada. Comenta en tono irónico simulando una conversación entre Paris y su padre: “-¿Qué quieres para tu cumpleaños, nena?; -¿Un cociente intelectual de superdotada, porfa?”; con la intención de mostrar que una chica que tiene mucho dinero puede ganar de su padre lo que sea. Y pone en discusión la veracidad del resultado de la prueba bajo las conocidas actitudes de la heredera. El tercer párrafo es un análisis sobre la ventaja de ser o no un superdotado. El cuarto párrafo trae ejemplos de personas que tienen el cociente alto de inteligencia; enjuicia diciendo que la perseverancia puede llevar a una persona al éxito. Contrasta el talento y el éxito y en el último concluye que la inteligencia no está directamente ligada a la madurez.
La estructura externa contiene cinco párrafos. El lenguaje informal es una marca de todo el texto. Rosa Montero demuestra su punto de vista y se dirige a un lector modelo que se siente a gusto con lo que escribe y comparte de su opinión. Se refiere a este en la tercera persona de plural. La autora española utiliza la primera persona y explicita su presencia, algunos ejemplos son “Nunca me he fiado” (l.1); “Siempre sospeché” (l.7), muestran su presencia explícita. Podemos ver el uso de la tercera persona de plural como generalización de las afirmaciones, “Dicen” (l. 20). Hay la construcción con la partícula de impersonalidad (se considera; l.9). La autora usa la primera persona del plural: “Todos conocemos” (l.34); “Somos animales” (l.40), mostrando empatía y proximidad. Las modalizaciones son características de un texto de opinión e indican la subjetividad del autor enriqueciendo el contenido, un ejemplo es como se refiere a la heredera tratándole de inconmensurable petarda (l.8), mentecata (l.16). Algunas expresiones coloquiales como: ¿No medirán en realidad estos test otra cosa, como el narcisismo, la superficialidad o el delirio egocéntrico? (l. 18-19), dan la fluidez de discurso oral. La intención de la escritora es hablar en derecho con sus lectores, proporcionando un acercamiento con el receptor.
Para terminar, es bueno comentar que los test psicológicos son de gran valor en la labor de un psicólogo. Pero con la difusión y el mal uso de este instrumento percibimos la pérdida de fiabilidad.
!Hola! Eliana,
ResponderEliminarEstá muy bueno tu comentario. Hablaste bien de los puntos semanticos de cada párrafo y aun hiciste un buen análisis de la estructura externa del texto.
Sólo me ha incomodado una cosa: no creo que el objetivo del texto sea solamente criticar la confiabilidad de los testes de inteligencia.
Abrazos.