Comentario del texto “Venganza académica” - Arturo Pérez-Reverte – Madrid, 2008.
En el texto “Venganza académica”, Arturo Pérez-Reverte comenta el trabajo que algunas personas tienen en colaborar con los autores corrigiendo los errores que sus textos puedan presentar. Para él los libros son “paridos con interés”, o sea, hechos con gran dedicación por los autores, y por esa razón, este autor cuando verifica que alguien encontró un error en su obra, se siente delante de una situación muy incómoda y desagradable, y ese es el tema principal discutido por Reverte.
Más allá de eso, Pérez-Reverte refleja gran ironía sobre el tema, lo que se nota a través de las propias metáforas, con las cuales nombra varios tipos de personas y situaciones, como es el ejemplo de los “cantamañas, listillos y tocapelotas”. Vemos que, desde el inicio, la crítica se construye por figuras estilísticas como la ironía y expresiones metafóricas, como vimos en este caso de “parir con interés” la obra, dentre otros ejemplos manifestados durante toda la lectura.
Es interesante notar que, desde el inicio, el autor busca una relación de proximidad frente al lector a través de un lenguaje informal y repleto de jergas y coloquialismos, lo que explica el uso de términos particulares de una clase de persona y también de un lenguaje propio de la conversación oral y cotidiana.
Desde la primera frase del texto, se enuncia “alguna vez les he contado que...”, con la intención de aproximarse al lector, como si estuviera invitándole a participar de sus premisas. Hay otro momento en que dice “así que imaginen con qué placer...”, o sea, otro tratamiento informal y que produce este acercamiento. Además, el autor emplea términos como “supongo” y “como digo”, lo que revela la deixis de 1ª persona del singular, eso es, la representación del “yo” – autor – que deja explícita su opinión en el texto.
Se puede observar aún los conocimientos enciclopédicos que están muy presentes en esta lectura, con el uso de palabras como cabrestante, lugre y eslora – que requieren un conocimiento previo para que puedan ser comprendidas en su contexto. Agrego aún la utilización de la sinonimia referencial, cuando el autor nombra a los “cazadores de erratas” de varias maneras, como raza aparte, cantamañas y listillos tocapelotas.
Otras características en relieve son la conexión y la cohesión. La primera está marcada por registros como “Eso se refiere también a...”, “Volviendo a lo de las erratas...” eso es, elementos que enlazan un tema ya referido en el discurso al otro que aún será expuesto. Ya la cohesión se manifiesta por medio de repetición de palabras-clave que favorecen la unión léxica del texto, vemos eso cuando emplea “el fulano”, refiriéndose al profesor de literaturas antes aludido.
Al final, Reverte llama la atención para la cantidad de expresiones irónicas y metafóricas con las cuales concluye el texto, una de ellas es “metiendo la gamba”, “pasándose de listo” y “goteándome el colmillo”. Para terminar, usa la intertextualidad para hacer referencia a otro texto y reafirmar sus ideas, destacando la Real Académia Española - diccionario que fue usado por él para atacar a la persona que trató de intimidarlo con denuncias de errores con respecto a su obra.
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Bueno, me alegro mucho por la oportunidad de hacer un humilde comentario de tu texto.He notado que has sido muy directa en tu crítica, o sea, te has ido directamente al grano, sin rodeos.Me gusta mucho eso, aún que no sea persona así.Puede que te haya faltado la referencia exacta en el texto sobre donde se encuentran las cosas que destacaste.Quizás un poco escueta, pero te lo repito "me encantó". Pienso que abordaste todos los tópicos de la crítica y lo has hecho de manera muy profisional. Thanks por regalarnos con tu publicación.
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